Este cuadro presenta una mariposa delicadamente trazada a mano con carbocillo, técnica que resalta las sombras, texturas y contrastes con una elegancia sobria y expresiva. El dibujo, de estilo orgánico y detallado, captura la belleza efímera de la naturaleza en una obra atemporal. Ideal para espacios que buscan un toque artístico y sereno, esta pieza se adapta perfectamente a interiores contemporáneos, naturales o escandinavos.